La Fuente del Caño

El manantial de la fuente del Caño surtió a la mayor parte del pueblo en los tiempos que no había agua corriente en las viviendas, por eso es considerada la fuente más importante del municipio. También se utilizaba este lugar como punto de reunión cuando los vecinos acudían a abastecerse.

Aún podemos observar en la pared de esta construcción histórica una inscripción del año 1909 grabada en la piedra abujardada, que dice: “Se prohíbe lavar en esta fuente bajo multa de 5 pesetas”.

El agua se recoge en un pilón que sirve de abrevadero para el ganado y los rebaños, y el cauce de este manantial continúa por el regato del Caño, que comparte su nombre, hasta desembocar en el río Duero, en el Paraje de La Calda. Este arroyo es un pequeño regato que rodea por el sureste el casco urbano de Castronuño. Antiguamente la zona del arroyo más próxima a la fuente era utilizada como lavadero de ropa.

Junto a la fuente podemos encontrar un área recreativa en sus inmediaciones, con bancos y mesas.